Entrevistas, Música

Santiago Motorizado: «Sería muy enriquecedor un mayor flujo de músicos entre España y Argentina»

Publicado originalmente en Valenciaplaza.com

El mató a un policía motorizado, una banda de rock formada en La Plata (Argentina), actuará por segunda vez -con la formación completa- en la ciudad de Valencia. La primera ocasión fue en 2010, acompañados de Radar, el mismo grupo formado por miembros valencianos que sonará justo antes que los platenses en la sala Wah Wah esta noche (22:00h, 10 euros anticipada/13 euros en taquilla).

Siendo una de las bandas referentes del indie-rock en Argentina y tras su paso por México, EMPM inició este mes de septiembre otra gira por España. A continuación de su paso durante las pasadas semanas por el festival Ebrovisión (Miranda de Ebro, Burgos), Huesca, Zaragoza y A Coruña, la formación recala de nuevo en Valencia donde llevan instalados algunos días. El pasado mes de mayo, su cantante, bajista y compositor Santiago Motorizado ya estuvo compartiendo humedad y noches de conciertos con esta ciudad, días después de haber actuado en el festival Primavera Sound de Barcelona, en un viaje acompañado por una caravana -en sentido literal- de músicos; los miembros de las bandas argentinas ‘107 Faunos’ y ‘Go-Neko!’.

Después de pasar una tarde de fútbol y sol en la playa, esta misma semana, el propio Santiago Motorizado celebra haber encontrado un sello en España (Limbo Starr) interesada en editar el que es su último trabajo: La Dinastia Scorpio.

-En comparación con vuestras anteriores grabaciones, la base rítmica del grupo parece mantenerse inalterable en La Dinastia Scorpio, pero las letras resultan algo más nostálgicas. ¿Fue algo premeditado?
-La verdad es que no, pero sí es así. Incluso en algunas tienen momentos épicos, pero coincido en que no se ha mermado la parte más enérgica del grupo.

-Las letras son una de las claves para el público que habéis logrado fidelizar en España. ¿Cómo vives tú, como autor de las mismas, la conexión con gente tan distante a tu realidad?
-Es curioso, pero tengo la sensación de que la existencia de un gran número de traducciones literarias en España que llegan tal cual a nuestro país influyen en la forma en la que escribimos. Lo más importante de las letras, para mí, es que las escribo pensando en poderlas sentir fuerte cuando estoy sobre el escenario. Que mientras interpreto, no mes resbalen. Son historias propias o de gente que ha estado muy cercana a mí y cuyas vivencias he sentido como propias.

-Hay una etiqueta sobre las letras que se repite: «urbanas». ¿Te gusta?
-La verdad es que lo son. Son cosas que me perturban, que son sinceras, pero que están en la calle y junto a mí.

-A veces son muy literales, como pegadas a un vocabulario concreto. ¿Hay algún autor que te haya influido?
-Me influyen especialmente los artistas que me rodean en Argentina. Aprecio mucho cómo fluye la escena musical en España, donde los grupos tienen cierta ruta de salas, a diferencia de lo que sucede allí. Allí todo pasa por Buenos Aires… (ellos son de La Plata). En este sentido, me influye mucho todo lo que escucho de las bandas argentinas. La música es mi vida y lo que se crea a mi alrededor me cautiva. Incluso, con bandas que estuvieron cerca mía en el pasado. Por ejemplo, las letras de Rosario Bléfari (de la banda ‘Suárez’) que me parece una de las mejores poetas no sólo de la música, sino de la historia.

-¿Cómo es esa relación entre artistas en tu entorno?
-La poesía de mis amigos, de los más cercanos, fue lo que me dio pie a iniciarme en la música y, sobre todo, a escribir. Empecé a partir de sus textos y me motiva ver qué hacen los aristas platenses y argentinos.

-¿Y cómo es la relación con las bandas españolas?
-Genial. Para nosotros, esta relación con otras bandas aquí es muy importante. Ojala pudiéramos viajar más, pero también bandas de aquí a Argentina. Bandas como ‘Los Planetas’, ‘Triángulo de Amor Bizarro’, ‘Hidrogenese’ o ‘Los Punsetes’. Un flujo de bandas entre ambos países creo que sería muy enriquecedor para todos, ojala se pudiera dar.

-Hablas bien de los circuitos de músicos en España. ¿Qué te hace compararlos en positivo con los de Argentina?
-Como te decía, todo pasa por Buenos Aires. Además, en un sentido artístico y social es muy distinto. Nosotros, mucho antes de venir a tocar al Primavera Sound, éramos seguidores de este festival; de festivales así. Allí no sucede algo de tanta magnitud. Un evento en el que se puedan reunir tantas bandas que admiro . Eso también es una diferencia.

-Y ahora estáis aquí con un sello que os edita vuestro último trabajo y con una gira plagada de fechas. ¿Cómo fue el contacto con Limbo Starr?
-Nos conocimos y nos enamoramos. También trabajamos con un sello local en México que nos distribuye (Intolerancia) y necesitamos que la gente que nos ‘saque’ trabaje como nosotros: de forma independiente, sin el ritmo acelerado de las grandes discográficas. Con David y Carmen (Limbo Starr) fue un amor a primera vista y estamos encantados con la edición del disco.

-No son vuestros únicos ‘flechazos’ en España. A Radar les conocisteis -cosas de Internet- después de que se publicara un vídeo de un concierto en el que versionaban una canción vuestra.
-Sí, y desde entonces empezamos a cruzar mails. Por aquel entonces quedaba muy lejos que pudiéramos venir alguna vez a España. Pero de repente llegamos al Primavera Sound (en 2010) y por supuesto quisimos organizar algo en Valencia. Gracias a ellos hemos llegado aquí y también son personas increíbles, que amamos.

-Hablábamos de viajes y sinergias. Vosotros, pese a la vitola de independientes, no paráis de venir a España.
-Es mi profesión y el grupo ha generado los recursos como para que pueda vivir de esto. No tengo muchos lujos, pero tampoco siento que los necesite.

-Haciendo el viaje inverso, España-Argentina, hasta que la industria se perdió en era digital, todo lo que triunfaba aquí a nivel mainstream podía darse una buena gira por vuestro país. ¿Cómo se vivía allí?
-Y… sí. Era así. Todo lo que tenía movimiento en España podía pegar allí, aunque tampoco tengo muchas referencias. El problema es que eso, no lo sé, quizá impedía que llegaran otras bandas. Allí teníamos mucho Serrat, Sabina… ¡Los Rodríguez!, que me encantan, pero yo hubiera preferido que llegaran Los Planetas.

-Leer sobre vosotros es leer un sinfín de etiquetas: años 90, The Strokes, Los Planetas, Pixies y algunas otras a cada cual más distante. ¿Cuále es la que más gracia os ha hecho durante estos años?
-(Ríe). La verdad es que han sido muchas, pero hubo una en Argentina que nos hizo mucha gracia. Decía: «los nuevos reyes del Pop». A mí me encanta el pop, para nada me molesta, pero el sentido del pop en Argentina no es como en España. A mí aquello me sonó inevitablemente a Michael Jackson.